Ayer, 9 de Marzo de 2923 me enteré de la muerte de Manin, uno de mis héroes. En el ICM de Madrid de 2006 lo conocí de lejos. No podía creer que ese hombre menudo oriental, que me recordaba a otro de mis héroes AT, fuera el autor de tantos libros preciosos que he ojeado. En algunas de sus páginas he pasado largos días fascinado por su prosa y por su profundidad. Realmente me siento muy triste. Y hoy como alivio empecé a construir en mi abandonada Fonda un espacio dedicado a recordarlo.